¿Por qué elegir
Caldera de Vapor Eléctrica para Calefacción?
Las calderas de condensación son soluciones avanzadas que mejoran la eficiencia energética al incorporar condensadores y economizadores de alta eficiencia para capturar el calor de los gases de escape. El diseño busca utilizar tanto el calor sensible como el calor latente liberado por la condensación del vapor de agua, mejorando notablemente la eficiencia térmica.
El sistema aprovecha las grandes cantidades de vapor producidas durante la combustión, especialmente de combustibles ricos en hidrógeno como el gas natural. Mediante el uso de un condensador, este vapor -junto con su considerable calor latente- se condensa, recuperando calor que de otro modo escaparía con los gases de combustión. Este proceso no solo conserva energía, sino que también reduce significativamente la pérdida de calor.
Con esta tecnología innovadora, una caldera de vapor de condensación de bajo nitrógeno podría teóricamente aumentar la tasa de uso de energía térmica en más del 7,2%, lo que se traduce en un ahorro de casi el 10% en gas natural. Esto hace que la eficiencia térmica de una caldera de condensación de hasta el 105% no solo sea alcanzable, sino también científicamente fundamentada, redefiniendo los estándares de eficiencia en la tecnología de calefacción.